24 abril 2024

¿Qué nos cuestionamos los padres sobre drogas?

El CPA de General Viamonte comparte con la comunidad un pasaje del libro “DROGAS. Adolescentes en peligro, padres desorientados” de Laura Gómez López y Flavia Marchioni. Ed. Paidós.

Trataremos de dar respuesta a algunas de las preguntas que han surgido sobre esta temática a partir del contacto con padres de adolescentes, como por ejemplo: “¿Cómo identifico si mi hijo toma drogas?”, “¿La marihuana es adictiva?”, “¿Se puede autocontrolar el consumo de drogas?”, “Si hablo con mi hijo sobre las drogas, ¿no lo estoy incitando a que las pruebe?”.

¿los adictos son personas con problemas psicológicos o carencias en el hogar?

No hay un perfil, cualquiera de nuestros niños y adolescentes puede resultar consumidor de drogas, ya que la tentación será la misma para todos ellos, sin importar qué tan protegidos creamos que están. Ni una clase social alta, ni una escuela privada, ni un grupo de amigos selecto podrán evitar que entren en contacto con las drogas.

Por eso debemos centrarnos en la prevención, es decir, en prepararlos para que, cuando les llegue el momento, sepan reaccionar de manera correcta y entender que ese no es el camino adecuado para sus vidas.

Enseñarles a nuestros hijos a saber cuándo decir “no”.

¿Cuál es la diferencia entre alguien que experimentó alguna vez con drogas y alguien que ya es dependiente?

Como venimos diciendo a lo largo de este trabajo, las drogas están cada vez más presentes en nuestra sociedad. Es muy probable que los adolescentes, en su afán por probar y “ver qué pasa”, experimenten con drogas.

La persona que presenta una dependencia necesita de la sustancia en cierta cantidad y con determinada frecuencia, y desarrolla tolerancia, es decir, cada vez necesita más droga para producir el mismo efecto o estado psicológico, y esto afecta inexorablemente su comportamiento y su vida. También se observa la aparición del síndrome de abstinencia.

En este punto es importantísimo destacar que muchos adolescentes pueden experimentar con drogas en algún momento, pero no todos desarrollan una adicción.

¿se puede autocontrolar el consumo de drogas?

En la actualidad la tendencia es hablar de consumo responsable. Tenemos una gran duda respecto a este término, y es que, si partimos de la definición de droga como una sustancia que genera cambios en nuestro sistema de forma artificial y de que esos cambios generan problemas de salud que incluso pueden llevar a la muerte en el primer y único consumo, ¿de qué consumo responsable estaríamos hablando?

La otra definición es la de consumidor esporádico, que serían aquellas personas que consumen sustancias de forma ocasional y luego no lo hacen más durante largos períodos de tiempo o incluso nunca más, pero lamentablemente estos son los menos, ya que todos los estudios indican una tendencia a la cronificación en el consumo, que es más probable y más dañina cuanto más temprano es el inicio.

Sin embargo, no es raro escuchar frases como “Tranquilo, yo solo consumo cuando quiero” o “Esto lo dejo cuando quiero”. Una de las cosas más difíciles es verse a uno mismo como un adicto, ya que esto lleva múltiples connotaciones tanto emocionales como sociales, así como un reconocimiento de nuestra debilidad.

La dificultad para dejar las drogas incrementa en función del estado de dependencia que ya se tenga, y esta responde a muchos factores. Dejarlas no es solo una cuestión de voluntad, ya que, además, es común que las adicciones coexistan (politoxicomanía) y que se den junto con otros trastornos, lo que convierte la solución a este problema en algo bastante más complejo que la simple fuerza de voluntad. Es lo que se denomina patologías duales.

Lo que sí es claro es que tiene que existir un deseo, una motivación para abandonar el consumo. Esto es imprescindible para que el tratamiento de la adicción sea exitoso Por esa razón debe ser el propio adicto quien admita que tiene un problema y que quiere cambiarlo.

¿Por qué los adolescentes consumen drogas por primera vez?

Los adolescentes generalmente piensan que las drogas son una solución, pero lo que sabemos es que siempre las drogas se convierten en un problema. Y esto es lo que, como padres, debemos transmitirles a nuestros hijos. Por muy difíciles y complejas que parezcan las situaciones que el adolescente atraviesa, las consecuencia. del consumo son siempre peores que el problema que está tratando de resolver con ellas.

Estos son algunos de los motivos por los que los adolescentes incurren en el consumo de drogas:

Es una muestra de rebeldía para con los límites de la sociedad.

Sentimiento de pertenencia. Nada es más importante para los adolescentes que ser aceptados en un grupo.

Adrenalina. A ellos les gustan los riesgos y no miden las consecuencias.

Pura diversión.

Está de moda.

Para perder la timidez y poder hacer cosas que de otra forma no se atreverían.

Los hace sentirse mayores.

Como escape de las presiones sociales, escolares y familiares.

Para olvidar sus problemas.

Para salir de la tristeza que muchas veces sienten en esta etapa.

Los adolescentes parecen no poder medir las consecuencias de sus actos. Esto se debe básicamente a que, para ellos, la vida es lo que pasa hoy, es decir, no pueden proyectarse hacia el futuro, y en esto reside nuestro rol como padres, en hacerles ver el enorme perjuicio que de­jarán las drogas en sus posibilidades y vidas futuras.

El Centro Provincial de Atención a las Adicciones de General Viamonte (C.P.A.) recuerda a la población que el equipo está disponible para orientar, en forma gratuita y anónima, en el consumo problemático de alcohol o drogas a quien lo necesite, en sus instalaciones de Diagonal Güemes y Vicente López y Planes de lunes a viernes de 8 a 14 hs.. Ante cualquier inquietud comunicarse al tel. 44 3612 o escribir a cpaviamonte@gmail.com.