Lencina repudió el Golpe de Estado en Bolivia y lo vinculó al «Caos de gobiernos populistas»

La Presidenta del HCD de General Viamonte, Aranzazú Lencina (Cambiemos), dio su opinión a Viamonte Digital respecto al Golpe de Estado en Bolivia.

Opinión:

Como lo expresaran muchos de los dirigentes radicales, lo que ocurrió en el Estado Plurinacional de Bolivia es un Golpe de Estado como resultado de un proceso de múltiples acciones que contrariaron el Estado de Derecho.

Repudiamos, éste y todos los Golpes de Estado, los gobiernos totalitarios, populistas y autócratas que han generado el caos en nuestra región valiéndose de las herramientas democráticas para perpetuarse en el poder, no siendo esto el justificativo para una intervención de las FFAA.

Ahora bien, desde la dirigencia debemos ser coherentes y repudiar todo aquello que atente contra la democracia. Particularmente, en la sesión del miércoles, fui testigo de la incoherencia, cuando personas que decían apoyar el gobierno de Evo Morales insultaron al Presidente Argentino y el bloque al que fueron a acompañar no tomaron la firme decisión de repudiar también ese hecho.

Hoy, como radical, siento un gran orgullo de tener de referente a un gran Presidente como Raúl Alfonsín, quien sentó las bases de la DEMOCRACIA para siempre, cuando muchos le daban la espalda y fueron cómplices de no sostenerlo hasta el último día de su mandato. Fue Raúl Alfonsín el que militó la necesidad de contar con Estados Democráticos en la región como muestra de un gran compromiso con la libertad que debe gozar el pueblo.

Por último, el día de la Sesión Ordinaria se celebró la Asamblea Legislativa que ratificó el escrutinio definitivo y proclamo la fórmula presidencial que asumirá en pocos días. Como argentinos nos tenemos que sentir orgullosos ya que a pesar de las diferencias tenemos presentes que el derecho de elegir nuestros representantes no debe ser vulnerado bajo ningún artilugio.

Los gobiernos deben terminar sus mandatos, las FFAA no deben intervenir e interrumpir los procesos democráticos, el NUNCA MÁS nos interpela y la coherencia nos define.