La falta de actividad física podría generar enfermedades crónicas
Entre 2020 y 2030, casi 500 millones de personas podrían padecer enfermedades cardíacas, obesidad, diabetes u otras enfermedades crónicas atribuibles a la inactividad física.
Entre 2020 y 2030, casi 500 millones de personas podrían padecer enfermedades cardíacas, obesidad, diabetes u otras enfermedades crónicas atribuibles a la inactividad física. Debido a lo anterior, los gobiernos podrían realizar un gasto de 27.000 millones de dólares anuales, tras no tomar medidas para fomentar una mayor actividad física.
Lo anterior, según un informe sobre la situación global de la actividad física 2022 por la Organización Mundial de la Salud. Igualmente, la OMS mide hasta qué punto los gobiernos están implementando las recomendaciones para aumentar la actividad física en todas las edades y capacidades para la prevención de enfermedades crónicas
Así pues, dicho informe señaló que en 194 países, el progreso es lento y que deben acelerar el desarrollo y la implementación de políticas para aumentar los niveles de actividad física. Y, por lo tanto, prevenir enfermedades crónicas y reducir la carga en los sistemas de atención médica los cuales ya están sobrecargados.
Con ello, otros de los datos que destacan en el informe son que menos del 50 por ciento de los países cuentan con una política nacional de actividad física. Asimismo, de dichos países, menos del 40% de ellos están operando actualmente. Además, solo el 30% de los países tienen pautas nacionales de actividad física para todos los grupos de edad y prevenir enfermedades crónicas.
De esta manera, los 194 países mencionados reportan un sistema para monitorear la actividad física en adultos y evitar que padezcan enfermedades crónicas. Igualmente, el 75% de los países monitorean la actividad física entre los adolescentes, y menos del 30% controlan la actividad física en niños menores de 5 años.
Finalmente, en áreas de políticas que podrían fomentar el transporte activo y sostenible, solo un poco más del 40% de los países tienen estándares de diseño de carreteras. Esto, para hacer que caminar y andar en bicicleta sean más seguros; además, de evitar enfermedades crónicas con dichas actividades.
Igualmente, solo un poco más del 50% de los países realizaron una campaña de comunicación nacional u organizaron eventos de actividad física de participación masiva en los últimos dos años. En ese sentido, la pandemia de la Covid-19 no solo ha paralizado las iniciativas de los gobiernos. Sino, que también afectó la implementación de otras políticas para el acceso y las oportunidades para participar en la actividad física para muchas comunidades y evitar enfermedades crónicas.
Respecto a lo anterior, el informe invita a los países a priorizar la actividad física como clave para mejorar la salud y abordar las enfermedades crónicas. Integrando la actividad física en todas las políticas relevantes y desarrollando herramientas, orientación y capacitación para mejorar la implementación. «Necesitamos que más países amplíen la implementación de políticas para ayudar a las personas a ser más activas. Ello, a través de caminatas, ciclismo, y otros deportes y actividades físicas», dijo la OMS al dar a conocer el informe.