Alberto Fernández, tras su encuentro con el Papa: «Le pedí ayuda en el tema de la deuda»
El Presidente brindó una conferencia de prensa en la residencia de la embajada argentina ante la Santa Sede, tras reunirse a solas con Francisco.
El Presidente brindó una conferencia de prensa en la residencia de la embajada argentina ante la Santa Sede, tras reunirse a solas con Francisco.
El presidente Alberto Fernández aseguró hoy que, en el encuentro a solas con el papa Francisco que compartió hoy en el Vaticano durante 44 minutos, le pidió «ayuda en el tema de la deuda» y que hará «todo lo que pueda», y sostuvo que con el Sumo Pontífice comparte «la obsesión de terminar con las disputas entre los argentinos».
«El Papa ya nos está ayudando mucho, pero no necesariamente tiene que estar mostrando lo que ayuda. Yo valoro mucho la ayuda del Papa porque es un argentino preocupado por su patria», destacó el mandatario consultado sobre la posición de Jorge Bergoglio de cara a la situación social y económica del país, en una conferencia de prensa que brindó tras la reunión en la residencia de la embajada argentina ante la Santa Sede.
«Estoy seguro que va a hacer lo que pueda hacer para ayudarnos», remarcó el jefe de Estado sobre la conversación que mantuvo esta mañana con el papa Francisco en la Biblioteca del Palacio Apostólico del Vaticano.
En este marco, detalló que con el Papa comparten «la obsesión de terminar con las disputas entre argentinos» y los dos están de acuerdo «en que la Argentina tiene que terminar sus tiempos de disputa».
Además, Alberto Fernández destacó que el pontífice «ya está ayudando a la Argentina y lo va a seguir haciendo porque quiere mucho a su país».
«Tuvimos una reunión que a mi juicio fue muy grata, más que grata; siempre ver al papa Francisco es para mi muy reconfortante. Me parece un pastor de la Iglesia enorme y un líder moral inmenso. Me pone muy contento haber podido hablar con él como hablamos», planteó Fernández en conferencia de prensa tras la reunión.
En las declaraciones, el mandatario planteó que el pontífice «sabe que siempre lo invito» a visitar el país «y siempre quiero que vaya pero no quiero que se sienta presionado ni sienta ninguna imposición de mi parte».
«Creo que los argentinos perdemos noción de lo que es el Papa. Es argentino pero esta mucho mas alla de los argentinos, no quiero que lo disputemos el Papa en los ultimos años entró en un terreno de disputa de ver de quien es el Papa, y el Papa es de la humanidad, no es de ningun sector de la Argentina», agregó el presidente.
«Me dijo que valoraba mucho el esfuerzo que estaba haciendo por unificar a la Argentina y que lo siga haciendo», planteó el mandatario.
Consultado sobre si se habló de la posible ayuda del pontífice para la economía del país, Fernández aseveró: «Siempre le pido ayuda».
El pontífice, según el presidente, respondió «que siempre ayuda y siempre va a ayudar».
«Sé que cuento con él. Le pedi que todo lo que pueda hacer para ayudarnos lo haga y se que lo va a hacer porque quiere mucho a su pais y a los argentinos», agregó el mandatario.
«Con el Papa tenemos una suerte de obsesión que es terminar con la disputa de los argentinos y que nos pongamos a tirar todos para el mismo lado. Los dos estamos de acuerdo en que la argentinos tiene que terminar sus tiempos de disputa», destacó Fernández.
El presidente Alberto Fernández mantuvo hoy una reunión a solas con el papa Francisco, que se extendió durante 44 minutos y se desarrolló en la Biblioteca del Palacio Apostólico del Vaticano.
Tras el encuentro, en el marco del intercambio protocolar de obsequios, el papa Francisco le pidió al presidente Alberto Fernández que «sean mensajeros de la paz», al entregarle una escultura con forma de medallón que simboliza la paz y que contiene un olivo, una vid y una paloma, según le explicó el propio pontífice al mandatario.
«Este lo elegí yo para que sean mensajeros de la paz», expresó el Santo Padre, en tanto Alberto Fernández le entregó, a su vez, un busto del Siervo de Dios conocido como «Negro Manuel», un libro sobre los cafés porteños y un tejido elaborado en un telar artesanal por jóvenes de la asociación civil Granja Andar.
«Santo Padre, qué gusto verlo», le dijo el presidente Alberto Fernández al papa Francisco en su primer contacto en la Sala del Tronetto, contigua al lugar de la reunión, mientras que el Sumo Pontífice le respondió con un «bienvenido».
Luego, al cederle el paso para ingresar a la Biblioteca del Palacio Apostólico, Francisco le dijo «primero el monaguillo».
En tanto, tras la finalización del encuentro a solas, comenzó a las 10:27 hora local (6:27 de la Argentina) y que finalizó a las 11:11 hora local (7:11 de la Argentina), tuvo lugar el momento del intercambio de obsequios, ya con la participación de la primera dama, Fabiola Yañez, y funcionarios que integran la delegación.
«Ella trabaja con Scholas», planteó el pontífice cuando el presidente el presentó a la Primera Dama, recordando la visita que Yañez había hecho a las oficinas de la fundación pontificia en Roma el pasado 13 de diciembre.
Luego saludó uno por uno a los miembros de la delegación: bromeó con el secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Béliz («haciendo travesuras», le dijo); habló con el canciller Felipe Solá sobre «cuántos años» que no se veían; abrazó al secretario de Culto, Guillermo Olivieri, y saludó entre sonrisas al secretario de Comunicación y Prensa, Juan Pablo Biondi, y a la ministra de Justicia ,Marcela Losardo.
Seguidamente, en un gesto inusual, Francisco firmó en el momento uno de los cinco escritos que le regaló al presidente: la exhortación apostólica de 2019 dedicada a la juventud, «Christus Vivit».
En un clima distentido, el Papa, luego, le planteó al mandatario la importancia de que los gobernantes «no pierdan el sentido de humor», antes de leerle una cita de Santo Tomás Moro del siglo XV, tomada de uno de sus escritos.
Fuente: Telam