22 noviembre 2024

El mensaje del papa Francisco por la violencia y el narcotráfico que está sufriendo rosario

El líder de la Iglesia Católica realizó un video para brindarle su apoyo a todos los rosarinos y enviarles un mensaje: «En el camino de la paz se deben transitar respuestas complejas e integrales, con la colaboración de todas las instituciones que conforman la vida de una sociedad».

Tras estar atravesando uno de los peores momentos de los últimos años ligados a la violencia y al narcotráfico, la ciudad de Rosario recibió este martes un mensaje del papa Francisco, quien siempre se muestra presente ante las situaciones de inseguridad y agresividad que se viven en diferentes partes del mundo.

Mediante un video de siete minutos de duración, el líder de la Iglesia Católica expresó su preocupación por la situación y brindó su opinión sobre lo que cree que deben hacer al autoridades al respecto: «En un momento de crisis, comprendemos la necesidad de la presencia de las fuerzas de seguridad para llevar tranquilidad a la comunidad. No obstante, sabemos que en el camino de la paz se deben transitar respuestas complejas e integrales, con la colaboración de todas las instituciones que conforman la vida de una sociedad«, comenzó.

 

Y añadió: «Es necesario fortalecer la comunidad. Todo pueblo tiene en sí mismo las herramientas para superar aquello que atenta contra su propia integridad, contra la vida de sus hijos más débiles. Nadie de buena voluntad puede sentirse excluido ni ser excluido, de la gran tarea de que Rosario sea un lugar en el que todos puedan experimentarse hermanos«.

Asimismo, el sumo pontífice explicó que la región llegó a esta situación por la complicidad entre el sector del poder político, policial, judicial, económico y financiero. Ante este panorama, reveló que es fundamental rehabilitar la política, que «es una altísima vocación, es una de las formas más preciosas de la caridad, porque busca el bien común». Además, comentó que es necesario que todos los sectores políticos trabajen en «la demanda de drogas, a través de políticas de prevención y asistencia«. Caso contrario, el silencio del estado naturalizará y facilitará «la promoción del consumo y comercialización de las mismas».

En la misma línea, manifestó que el sistema democrático debe velar por la institucionalidad de la Justicia, «de tal manera que pueda ser independiente», así como también expresó que «cada miembro del Poder Judicial es responsable de custodiar su integridad». Y agregó: «Agradecer a todos aquellos hombres y mujeres que con su compromiso silencioso con la justicia, muchas veces, ponen en riesgo su propia vida por el bien común en un contexto tan deshumanizado«.

Francisco realizó un video solidarizándose con la ciudad de Rosario.

Finalizando el comunicado, el obispo de Roma declaró que los empresarios deben tomar un rol importante en esta situación, pues «no hay una mala economía sin la complicidad de una parte del sector privado». Y sumó: «Hay una gran tarea por delante en el sector empresarial, no sólo en impedir la complicidad en los negocios con las organizaciones mafiosas, sino también en su compromiso social. La paz es una empresa que exige de la creatividad y compromiso de todos aquellos que tiene el don de emprender e innovar y ustedes saben como hacerlo«.

Al mismo tiempo, especificó que el Estado y las instituciones intermedias tienen que brindar espacios comunitarios en los barrios vulnerables, ya que «en todo sistema mafioso, los pobres son el material descartable«. «Todas las instituciones sociales, civiles y religiosas debemos de estar unidas para hacer lo que mejor sabemos hacer: crear comunidad. Todos podemos colaborar y ser parte de los espacios deportivos, educativos y comunitarios. El temor siempre aísla y paralizaNo teman comprometerse«.

Por último, comunicó que la Iglesia acompañará espiritual y orgánicamente a «a los familiares de las víctimas que han perdido su vida a causa de la violencia, a los enfermos, a quienes viven el flagelo de las adicciones y a sus familiares, a quienes están presos y luego necesitan un camino de reinserción, a quienes viven en situaciones de vulnerabilidad extrema».